En el pueblo italiano de Arezzo, “la vida es bella”

En el pueblo italiano de Arezzo, “la vida es bella”
¿Quién no recuerda la película La Vida es Bella? Roberto Benigni nos encogió el corazón con esta triste a la par que preciosa película italiana. Desde Ice Tech queremos transportaros a unos pueblos de película. Hoy empezamos con Arezzo, el pueblo italiano donde “la vida es bella”.


Es posible que esta película haya marcado una época. Roberto Benigni fue capaz de emocionarnos en cada una de las escenas. Reímos y lloramos a partes iguales. El “Buenos días princesa” del protagonista ya forma parte de las frases más representativas del cine. 
La provincia de Arezzo está situada en la parte oriental de Toscana. Sólo con este dato, visitaría es una apuesta segura. Está rodeada por los Montes Apeninos, lo que te asegura un paisaje digno de postal. La belleza natural de sus paisajes se funde armoniosamente con con testimonios históricos y obras de arte de Atrezzo.
La mayoría de las escenas exteriores de La Vida Es Bella se rodaron en el centro histórico de la ciudad. 

¿Qué ver en Arezzo?

Piazza Grande

Es la Plaza Mayor de Arezzo. En esta plaza se rodaron muchas de las escenas de la peli. ¿Os acordais del paseo en bici de Guido con su mujer y su hijo? ¡Es una escena mítica! 
Esta Plaza rezuma felicidad, diversión y optimismo, tres de las virtudes del protagonista de la peli.
Os recomendamos que visiteis su mercado de las antigüedades. Se celebra el último sábado y el primer domingo de cada mes.

La Pieve de Santa María

La Pieve de Santa María es una joya del románico toscano. Construida entre el siglo XII y el XIV, su fachada está ricamente decorada con esculturas y bajorrelieves. La verdad es que su fachada nos parece increíble. Utiliza arcos de diferentes tamaños y niveles. De hecho su torre, construida en 1.330, es conocida como la torre de los Cien Agujeros.

La casa de Petrarca

Petrarca es considerado uno de los impulsores del dialecto toscano. El conocido poeta italiano nació en 1.304. Cuentan que esta casa fue dañada por los bombardeos aliados en la segunda guerra mundial. Hoy es la sede de la Academia de las Letras, Artes y Ciencias. Podemos visitar la biblioteca con incunables y ejemplares de las obras. 
Pasear por sus calles, degustar un buen plato de pasta y un postre italiano o beberte un buen licor con hielo Ice Tech son algunos de los placeres que te ofrece esta bella ciudad.